HOLA A TODOS

Este blog se ha creado de forma secundaria al blog Adictos a la Escritura, para poder dar cabida a las publicaciones de aquellos miembros que carezcan de un lugar propio.

Un saludo

Sandra

jueves, 21 de octubre de 2010

CREACIÓN DE UN PERSONAJE LITERARIO -FASE 2- AUTORA AROA

Agustina desde que tiene conciencia, sólo recuerda haber conocido a muy pocas personas en su vida, su padre y a su tía, viven en una casa con casi setenta habitaciones, la casa es tan grande como la isla en la que se encuentra, el farero  y ellos son los únicos habitantes del lugar, existe muy poca luz, el color gris es protagonista en todos los rincones del lugar, los árboles están desnudos casi todo el año, arañan el cielo con sus ramas descoloridas, el mar bravo en toda la costa, rompe  sus olas en los acantilados que la bordean, las chispitas de mar viajan, hasta las ropas de los habitantes, regalándoles continuamente un ir y venir de algas y cangrejos, la naturaleza les rodea, las vistas son preciosas desde cualquier rincón, pero al igual de gris esta el corazón de Agustina, siempre ha visto ese único color, único protagonista en toda su vida, la tristeza, y la desafortunada experiencia de  no saber, un secreto latente, y oscuro, que nunca se le ha revelado, lo único que posee de ese secreto, es el colgante que lleva siempre cerca del corazón. Una mañana despertó, y  el colgante estaba en su cuello, es un colgante ovalado, una chapita, de color cobre, pero sin ninguna grabación, ni retrato, ella siempre ha pensado que era de su madre.

Agustina, cansada de vivir así, quiere cambiar y tirarse al mundo de la ilusión y del amor, sueña con tener una amiga, un amor masculino, sus carnes vírgenes se lo recuerdan cada día, lo necesita, tener a alguien a quien poder contarle sus deseos, sus aventuras e inquietudes, además, siempre le aflora un amor desde muy dentro, nostalgia seca entre el corazón y el sentimiento que le hace temblar, dejándola casi sin fuerzas, una especie de ansiedad sin oxigeno.
La inquieta mucho el no saber, se siente de espaldas al mundo y sobre todo a los sentimientos, presa en su propia vida, llena de preguntas, nunca ha sabido del paradero de su madre, ni siquiera su nombre. Buscando su verdad, encuentra enfrentamientos y discusiones continuamente con su padre, él sabe la verdad y la lleva tatuada dentro de sí, no hay manera de sacársela, ella se la quiere arrancar como sea, pero una y otra vez, después de muchos intentos no consigue nada.
Después de una discusión sin respuestas con su padre, corre hacia su lugar preferido, al lado del mar, debajo de un árbol muy frondoso en lo alto de un acantilado, su rincón, el árbol siempre la recibe con las ramas abiertas como una madre recibe a un hija,cargada de lagrimas, sosteniéndolas en  el borde del llanto, decide refugiarse allí, está muy enfadada, muy rabiosa, le han arrebatado su pasado, y sin ese amuleto, llamado madre, no puede ver con claridad su futuro, piensa en arrojarse al mar, huir nadando sin rumbo, dejarse llevar, que la corriente elija su destino, se dispone a tirarse al vació del olvido, cuando, de repente, se ve frenada, todo se detiene a su alrededor, un frió le recorre todo su cuerpo, sus entrañas se pegan a la tierra y quiere morirse allí mismo, por lo que va a ocurrir, teme haber sido sorprendida por su padre, siente una presencia detrás de ella, se gira, y allí con todas sus fuerzas desvanecidas en ese mismo instante, encuentra a un joven mirándola, congelados los dos por la pausa del momento, como una fotografía, se quedan inmóviles al borde del acantilado, ella dejando a su lado, la última acción, decide fijarse en él, y ve que es muy guapo, rubio de tez blanca y ojos del color del agua, ella siente que es  el chico más guapo que ha visto nunca, por no decir el único. Si ¿todos son así?, me volveré loca de amor, no había sentido un sentimiento igual, unos escalofríos invaden su cuerpo, recorriéndole por todas  las entrañas miles de hormigas, con una misma meta, su corazón enamorado.
Solo con mirarlo sabía que ya era otra, lo necesitaba, quería sentirlo, su olor a menta fresca, la volvió loca, quería besarlo, no volver a separarse jamás de él, pero… se detiene, y se sonroja por haber sentido lo que ha  sentido, sin ni siquiera conocer a ese joven que tiene delante, él la coge delicadamente de la mano, ella siente su piel, ahora lo desea aún más, él le pregunta-¿Qué estabas haciendo?, ¿no pensaras?...., a ella ,se le pusieron las mejillas como dos cerezas, ella le respondió, -no, simplemente me gusta oler el mar, desde aquí.
Ella le pregunto que quien era. Escondiendo la vergüenza, en el tono más altivo que pudo interpretar,- ¿tú no eres de aquí? Él le contesto que era el nieto del farero.
De repente, sintió, algo extraño, su colgante se estaba calentando, se calentaba, y se calentaba, se lo tuvo que separar del pecho por que le quemaba la piel, no sabía por qué, siempre había tenido ese colgante con ella, y nunca había sentido nada igual, al sacarlo de su pecho, le pareció que cambiaba de color, y que empezaba a verse una imagen femenina, pero no pudo ver con claridad, se oyeron a lo lejos los chillidos de su padre, gritando su nombre, corrió ladera abajo, obligada a huir, no quería que su padre la viera en esa situación, la mataría, o aún peor la encerraría, y no quería que eso sucediera. Más tranquila, ya en su habitación, metió la mano debajo de la ropa buscando su colgante, y allí no estaba, lo había perdido.
Espero a la noche, y volvió al lugar, esperando encontrarlo, allí no había nada, volvió a su casa, muy inquieta, no quiso cenar, subió a su cuarto, miro tras la ventana, el faro iluminaba con sus ráfagas circulares toda la habitación, estaba lloviendo muy fuerte, no quería ni imaginar que habría sucedido con su colgante, el único tesoro de su madre, miró nuevamente por la ventana y allí, tras las rejas, pudo ver al joven de la tarde, mojado por la lluvia, él extendió la mano, y el faro giro justo en ese mismo instante, pudiendo ver, al tras luz su colgante, bajo corriendo las escalaras para ir a su encuentro, pero su padre se lo impidió.
A la mañana siguiente, fue a casa del farero, pero ya la familia y el joven se habían ido, el farero le dijo que vivían a la otra orilla, que estuviera tranquila que en cuanto lo viera le preguntaría por  su colgante, cada semana se iban a buscar provisiones. Esperó impaciente la llegada de ese día, y cuál fue su sorpresa, que  recibe un carta del  joven escondida, dentro de en un tarro de mermelada de fresa, en la carta, le comenta, que estuvo esperando toda la noche debajo de la lluvia para darle su colgante, que es un colgante muy bonito, y que tiene algo que contarle muy importante, se lo ha enseñado a su madre,  y ha reconocido a la señora que aparece dibujada en él, ella se queda muy sorprendida por que en el colgante no había nada, él le comenta que le mandará el colgante en la siguiente carta y si podría seguir escribiéndole, ella teniendo tanta inquietud e intriga, decide huir, fugarse al encuentro de sus preguntas, esa señora puede decirle donde está su madre y quien era, así que, sin pensarlo, decide esconderse en la barca de las provisiones, dejando atrás su pasado, decide ir en busca de la verdad, hacia la otra orilla, hacia el futuro con respuestas, por fin encontrará a su madre o por lo menos, también verá al joven que le ha cambiado el rumbo de su vida,  en la barca se pone a pensar y otras preguntas le vienen a la cabeza, ¿el colgante?, ¿qué le paso?, ¿por qué cambio de color? Será que… ¿estaba esperando a que yo sintiera verdadero amor?

Aroa.

CREACIÓN DE UN PERSONAJE LITERARIO - FASE 2 - AUTORA IRENE

Oyó el lobo aullar. Se movió rápidamente, cogió el arco y la capa. Y emitió un silbido alto y claro, que fluyó entre las hojas de los árboles. El aullido cesó instantáneamente. Roxanne sonrió, su forma de comunicarse no la podía averiguar nadie. Se puso la capa negra cuando la luz empezó a caer sobre ella.
Cuando sabes que vas a dirigirte a matar, a cambiar la vida de alguien, o a segar la de otra persona, no tienes sentimientos definidos. Intentas no pensar en ello, tu cerebro omite partes de la historia. Pero si intentas parar algo o a alguien, todo tu odio se intensifica y toma una dirección. Te preparas para lo que vas a vivir instantes después, evalúas todas las posibilidades.
Miró entre los árboles antes de salir. Ellos no habían llegado. No había nadie allí. Probablemente muchos de los habitantes que vivían en casas a metros del lugar, no sabían lo que se les avecinaría tan sólo unas cuantas horas después.
Se sentó en el borde, en la fina línea entre el bosque y la ciudad del aire. Las personas de Luminosa vendrían pronto. Estudiantes adultos, y personas dispuestas a ayudar, todas con dones del agua o del fuego, que habían formado una alianza ante los constantes secuestros de sus hijos por Aerum, un científico loco con alas. El problema era que ellos también tenían una alianza, estaban con los humanos sin dones, que ante el descubrimiento de la ciudad del aire, sólo querían poder. Habían llegado incluso a entregar a sus niños para que experimentaran con ellos. Deprimente. Eso era perder la cabeza.
La última niña que secuestraron se llamaba Luri y tenía tan sólo nueve años, con el don del agua. Intentaron quitarle los poderes, prácticamente no comió durante días, le daban lo suficiente para que sobreviviera. La tenían encerrada en una habitación blanca, sin muebles, en una de sus torres y cuando consiguieron quitarle el don, le implantaron alas. Murió al día siguiente. Era la hermana de Gabriel. Él ya estaba planeando esto desde hace tiempo, pero la pérdida de Luri hizo que todo el mundo diera un paso adelante.
Ella está con ellos, es su forma de apoyar a Gabriel, y de darle las gracias y devolverle el favor… empezando por el día en el que la recogió junto a otro mago.
De todas formas también está harta.
Se empieza a hacer de día, y ya están llegando. Gabriel la sonríe desde la multitud de personas que está con él. Es una sonrisa amarga y triste muy apropiada para la situación pero muy poco apropiada para él.
En la espera que acontece, algunos rostros se llenan de temor y otros de extraño miedo... pero muchos vuelven inmediatamente a la resolución, a la resolución de hacer justicia por sus seres queridos. La madrugada se desvanece y empieza la actividad en la ciudad del aire. Vemos a uno, uno de ellos de esos que tienen alas. Sobrevuela el cielo, encima de nuestras cabezas... sus alas parecen hechas de plumas grises del más puro porte elegante, acordes con sus ojos.
Pero se aparta rápidamente, va a dar la voz de alarma. No aparece la confusión, ni el miedo, pero sí el impertérrito orgullo.
Esperamos un poco más... van llegando guerreros del otro bando, y parece que saben muy bien la carta que van a jugar. Desde el aire, donde son más fuertes.
Va a empezar la lucha. Los dos bandos esperan el ataque, unos de los dos se decide. Son ellos. Aparecen vientos cálidos a nuestra espalda. Los magos del agua más avanzados dan un paso atrás e intentan contrarrestarlo. Los del fuego incendian las armas.
De pronto todo va más deprisa, esto es una contrarreloj en la que muchos quieren llegar a la vida pero sólo uno puede hacerlo.
Vuelan bolas de agua, tornados y fuego. Ha caído uno de ellos, de los que tienen alas.
Han caído muchos de los nuestros.
Roxanne ve una flecha incendiada pasar por la esquina de su ojo. Entonces se da cuenta. No está participando, no lucha... está observando desde el bosque.
Reacciona rápidamente, sus músculos se contraen por el rápido movimiento, en menos de un segundo dispara una flecha. Da de lleno en el corazón de un aerum. Lanza otra, muere otro. Hay un ángel que se acerca a ella, lleva como vestimenta la furia y como arma a sus alas, es un ser poderoso.
Los árboles se mueven, se van cayendo uno a uno, como piezas de dominó. Uno le pasa rozando, el otro se estrella contra sus piernas.
Se concentra, salta por encima del árbol y llega hasta él. Inmediatamente, sin pensarlo, ha colocado la flecha en el arco, y le apunta al estómago.
Le mira con rabia, aunque hay algo que le hace no disparar.  Un chico  unos cuatro años más joven que ella, se ha levantado entre la multitud, esquivando todo tipo de ataques, la tierra le acompaña, le ha dicho algo al oído que él no ha podido evitar escuchar. Parece que todos se quedan asombrados, claro, él tiene el don de la tierra, prácticamente inexistente.
-Todos conocéis la historia de mi raza, fuimos aniquilados en la guerra de hace milenios, porque éramos los más débiles, y siempre estábamos de parte de la paz, esto no puede seguir así, porque llegará un punto en que la magia quedará erradicada por nuestros errores… todos seremos como ellos, sin nada, en realidad, sabiendo de lo especial que es la magia y ser parte de ella, pero sin serlo realmente. Seremos completamente humanos, pero eso no es lo importante, perderemos el don de querer al mundo y sus fuerzas, perderemos el mundo en el que vivimos, por todo lo que estamos haciendo, estamos siendo egoístas, somos lo que somos, así que no intentemos cambiarlo, será peor si lo hacemos.
Al parecer todos se dieron por aludidos, bajaron la mirada y se fueron, dispuestos a intentar arreglarlo todo, mañana.
Todo se quedó un poco vacío… pero el chico no se había ido, Roxanne tampoco. Se acercó a él. Y se le quedó mirando, pero ante algo así no se quedó muda.
-Samuel… -dijo entre lágrimas- … estás vivo.
Él asintió, sin fuerzas para decir nada. Luego le bajó la capucha a su hermana, recordando su pelo antes de verlo y ambos se sentaron entre las hojas, con los ojos cerrados, asimilando todo lo que había pasado, y todo lo que estaba por pasar.

Irene (Aqua)

miércoles, 20 de octubre de 2010

CREACIÓN DE UN PERSONAJE LITERARIO - FASE 2- AUTORA LANA.

Buff, tengo que reconocer que a este trabajo le he dado mil vueltas y no he quedado totalmente satisfecha. Entre otras cosas, sé que no cumple el mínimo de dos páginas establecido, sino algo menos, pero es que cuando creé al personaje pensé directamente en hacer esto, que surge de una especie de parodia de mí misma y de mi gato, que es Miko ;) Intenté crear otra historia diferente y no me salía, ya que tenía ésta en la cabeza, y la alargué mucho más de lo que tenía pensado, pero esto fue lo máximo que estiró, de otra forma hubiera tenido demasiado relleno y preferí hacerla corta antes que hacer algo más largo y totalmente vacío de contenido. En fin, ahí va...


El mundo es un lugar peligroso.


La claridad que se filtraba por la ventana indicó a Miko que ya era hora de levantarse. Se desperezó antes de bajar aristocráticamente desde de lo alto del armario, donde dormía, y comenzó a llamar a la humana, ya era hora de que lo acariciara un rato.


Eva se levantó cuando su gato, o su despertador, como ella decía a veces, comenzó a maullar para que lo dejara entrar en el cuarto. Refunfuñando, se arrastró hasta los pies de la cama y, haciendo equilibrios, presionó el pomo de la puerta. Miko saltó encima de la cama ronroneando, y a Eva se le fue el mal humor matutino de un plumazo. ¡Cuánto quería a aquel gato blanco y suave como un peluche que le había cambiado la vida!


Miko se acurrucó al lado de la humana, satisfecho por los mimos que estaba recibiendo. Estaba empezando a dormitar cuando escuchó algo que se acercaba a su territorio, estiró las orejas y giró la cabeza en su dirección. Cuando todos sus sentidos le atestiguaron que aquel intruso se detenía en la entrada, saltó de la cama y se acercó sigilosamente a la puerta, olisqueando el aire.


Eva se incorporó de la cama al ver que Miko había escuchado algo tras la puerta de su pequeño apartamento. Su primer pensamiento fue de alarma, ¿quién está en la entrada de mi casa a estas horas de la mañana sin haber llamado antes al portero automático? Y si hay alguien ahí, ¿por qué tarda tanto en tocar el timbre? Quizás sólo es la señora de la limpieza fregando el piso... pero Miko tenía los ojos fijos en la puerta, con las pupilas completamente dilatadas y todos los músculos en tensión. No, Doña Anita no puede ser... Decidió acercarse de puntillas y atisbar por la mirilla, sin dejar de observar al gato para ver si abandonaba su posición de alerta indicándole que quien quiera que estuviese allí se había ido. Cuando estaba a punto de llegar a su objetivo, el ruido del timbre taladró sus oídos haciendo que diera un respingo y se le cortara la respiración de golpe.


Miko se erizó de pies a cabeza, pero no por aquel sonido atronador tan desagradable al que ya se había acostumbrado, sino porque la actitud de la humana indicaba, a todas luces, una grave situación de peligro. Se precipitó hacia los bajos de la cama a toda la velocidad que le permitieron sus patas en aquel suelo resbaladizo, arrasando con todo lo que tenía por delante, incluidas las extremidades inferiores de la humana, y se escondió allí, inmóvil, acechando desde su escondrijo.


Eva dio un traspiés cuando el gato se le enredó entre las piernas y colisionó de lleno contra la puerta de la entrada. ¡Mierda!, masculló. Ahora tendría que abrir la puerta porque, tras aquel escándalo, no podría simular que no había nadie en casa. Por supuesto, antes de abrir miraría, y más cuando el comportamiento de esa persona parecía tan sospechoso. Con los latidos del corazón aun palpitándole en las sienes, acercó su ojo al agujero. Cuál fue su sorpresa cuando, a través de él, vio la sombra de un hombre encapuchado que huía escaleras abajo. Reprimió el grito que quería salir de su garganta y se quedó un rato paralizada, sin dejar de mirar por si el ladrón volvía. De repente, le invadió una oleada de cariño por su guardián, su héroe, ¿quién necesitaba un perro cuando su lindo gatito era igual de eficaz? Tuvo que sacarlo a rastras de su escondrijo para cogerlo entre sus brazos y achucharlo hasta que se le pasó el miedo. Sin duda, formaban un gran equipo, estaban hechos el uno para el otro.


Y mientras, en la calle, un jovencito huía despavorido del edificio. Se quitó el gorro negro del uniforme mientras su tío lo miraba extrañado desde la furgoneta aparcada en doble fila en la que se leía "Venta de dulces a domicilio". ¿Quién será el loco que vive ahí? Pensó. Desde luego, el golpazo que había dado en la puerta era una clara advertencia de lo que haría con él si alguna vez osaba volver a molestar en su casa. Anotó mentalmente el número de la vivienda para ponerla en la lista roja. Definitivamente, aquel trabajo era mucho más peligroso de lo que jamás se hubiera imaginado.



Lana Drown.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

CREACIÓN DE UN PERSONAJE LITERARIO - FASE 1- AUTORA LANA

Nombre: Miko
Edad: Un año y medio
Estatura: 30 cm.
Complexión: Grande, bien alimentado.
Pelo: Blanco con algunas rayas grises.
Ojos: Verde - amarillo.


Personalidad: Miko es un gato doméstico y se puede decir que es el rey de la casa. Tiene miedo a los espacios abiertos porque nunca ha salido del pequeño piso en el que vive, y también se asusta cuando escucha ruidos extraños. Nunca ha bufado a nada ni a nadie, simplemente se eriza y se esconde bajo la cama hasta que se le pasa el susto. A ojos de los humanos es un gato cariñoso y divertido. Le encanta que lo peinen con un cepillo de púas duras, jugar con el agua del grifo y lamer las tapas de los yogures. A pesar de ser algo mimoso, no puede evitar el comportarse como un gato, y muchas veces mira a los humanos por encima del hombro, sin comprenderlos, aunque tampoco es que le importe.


Pasado: Fue abandonado con sólo un par de semanas en el jardín de una casa privada. Fue la jardinera quien, regando unas plantas, lo descubrió al oír un gemido. Sin poder evitarlo, lo enrolló en su jersey, se lo llevó a su casa y lo alimentó con una jeringuilla hasta que fue capaz de comer pienso. Desde entonces vive en su casa.


Lana Drown.

CREACIÓN DE UN PERSONAJE LITERARIO - FASE 1- AUTORA IRENE

Nombre: Roxanne
Edad: 15
Estatura: 1.75
Complexión: rasgos suaves y bien proporcionados.
Pelo: pelirroja
Ojos: de color azul claro.

Atuendo: en su mano derecha lleva una pulsera en forma de espiral, de color rojo fuego. También suele llevar una capa negra encima, que todos conocen como su distintivo.

Personalidad: inteligente, de carácter fuerte, sabe afrontar cualquier situación con entereza. Pero si la conoces bien, debajo de la máscara de seriedad, te encontrarás a una persona… ¿simpática? No,  nunca llegaría a ser simpática, pero te puedes llevar bien con ella, si haces algún esfuerzo que otro.  Aficionada a los lobos, la lectura y el arco.

Pasado: cuando era pequeña sus padres y su hermano menor desaparecieron en el bosque. Consiguió sobrevivir durante meses gracias a que su poder se empezó a desarrollar, hasta que la encontraron dos magos, de regiones diferentes. Los magos la criaron durante toda su infancia, luego ella empezó a hacer viajes a otras regiones.

Irene

martes, 21 de septiembre de 2010

CREACIÓN DE UN PERSONAJE LITERARIO -FASE 1- AUTORA AROA

Nombre: Agustina Perzon
Edad: 17
Estatura:1.68
Complexión: delgada
Pelo: castaño
Ojos: castaños
Atuendo: (ropa que usa, si lleva algún elemento identificativo, etc...)

Lleva trajes muy sueltos siempre con tonos pasteles y con flores, muy apropiado a su época, nació en 1800 por lo tanto en su época no existen los colores escandalosos, la obligan desde pequeña a llevar unos trajes que no le gustan, su tía y su padre son muy estrictos con su educación.
Lleva siempre un colgante que no lo enseña nunca, lo lleva entre la piel y la ropa, calentito, para que no se pierda nunca, es su mayor tesoro, siempre cerca de su corazón.

Aroa.